este desierto... Yo no soñaba sino con pinos dorados. Yo pensaba en romper la música y dibujar con palabras el aliento
de los pinos.
Pertenecer. Pertenecerse.
Obtener agua y continuar ensombreciendo el sol con las verdades. Sobrevivir. ¿Es ésto lo que queríamos? Queríamos vivir,
no sobrevivir.
Y qué es el poema sino un puñado de pájaros muertos en la mano.
Y qué es el poema sino un disparo al sol desde detrás de un peñasco de colores.
Y qué es el poema sino sobrevivir entre piedras calcinadas y antiguas.
Hay que inventar un agua en la garganta.
Pertenecer. Pertenecerse. Es esto todo al fin cuanto queríamos.
Un silencio incompleto. Un lugar de ceremonias sencillas y perfectas. Sólo falta que inventemos un viento."
La mirada de los héroes
Paulina Winderman
y después rabia, mucha rabia
6 comentarios:
¿Por qué la rabia, si hay poema donde estar?
a veces, los poemas son tiritas temporales
no niego su cura
un agua en la garganta!
agua viva.
Se ha bebido dos botellas de cocacola llenas
de vino de Chiclana
Ya tiene las ganas
y ahora solo busca un sitio
donde le dejen cantar"
Kiko veneno
¿y qué será después de todo esto?
supongo que un algo ave fénix tendremos todos
los resurgidos
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