Antes de conocerte, mucho antes, pensé en perseguirte por la ciudad blindada, con sigilo, inventar una fórmula para tu nombre, reconstruir tu historia a partir de aquel gesto de levantar, en el momento en que yo salía por la puerta, el vaso. Solo una noche y quería precisar donde vivías. Tendría que seguirte de puntillas por las nubes. Ser una sombra y no quitarme el antifaz y aquella capa de batallas ganadas que entonces avalaba mis ojos. Antes de conocerte, ibas vestido verde agua - tan lejos tú de lorca - , qué facil recordarte, tu voz también sonaba como el agua, a habitaciones donde el sol quiebra las persianas, donde duermen niños hasta entonces, cuando alguien los despierta y les sacude las sábanas del polvo de las hadas. Quise saber como despiertas.
Puede nacer el amor de la curiosidad?
(primera parte: escrita antes, mucho antes... )