28/1/09

¡gracias!

Yo escribí este poema a punto de volar hacia México hace un par de años. Sacando la lengua a Madrid, desde el avión, toda chula, pegada la nariz a la ventanilla. Un día, vi al señor Cuadritos, que vive aquí al lado, asomado a su ventana. Le llamé (eh, eh). Le conté unas cosillas y me dio un dibujo precioso que quiero compartir.



ahí te dejo Madrid
me voy a la ciudad de las dos lunas
y guardo este cuaderno en el bolsillo
-así vienes conmigo-
me quito las sandalias
y descalza
espero en el jardín
la sombra negra
dulce lluvia
de cenizas de la zafra

26/1/09

no puedo dejar de leer

Persépolis
(yo es que siempre llego tarde a todo)

22/1/09


Yo no sé nada de las mujeres
que ríen
tan tempranas.
Tienen el corazón
tiznado
de gotas de café
y humo de cigarro.
Su cadera se expande
sin dolores
sin los hijos colgando
sin la casa.
Las mujeres que libres
se reúnen
sin otra vocación que la mañana.
Nada sé yo de la mujer oscura
que adorna las esquinas.
Calle del Desengaño,
los yunqueros del cuerpo
golpean con su sombra
la lluvia prematura.
Tiene horarios la noche
que alzan sus cortinas
como en esta oficina
de mañana.
Nada se yo del abrigo arrugado
de la mujer
cautiva. El coche
y el frenazo
de cielo
sobre ella y en rojo,
el crujido de pétalos
perfuma su rutina
y carreteras insomnes.
Nada sé de su dolor vencido
de héroe que se esconde
de manzana brillante.
Pero todas,
lo sé,
regresan un instante
y, al menos,
unas horas
dormidas
reconocen sus sueños.



De paseo, hoy.

19/1/09

mis palabras vuelan al sur: un libro

Quería contarlo, pero no supe cómo. Ni sé. Que en abril, para cuando el agua más suave y la flor más abierta, algunas de las palabras que ya leyeron conmigo (y gracias) y otras tantas que guardaba en un cajón, alguien las coserá con un hilo. Sé que es pronto. Pero. Si mi cabeza y mis manos afilan lápices cada noche, por qué no contarlo. Será un libro. El primero. Nacerá al sur, en Cadiz. Y cruzará el océano tal vez. Conmigo seguro cuando pueda tocarlo. Al otro lado también quieren saber de mí los amigos. Ya tiene el nombre que más adelante les contaré.

Qué más decir que estoy feliz.
Que me muero por oler sus páginas.
Por tocarlo.
Y saber cómo será su cara.

12/1/09

CUATRO NARANJAS. CUATRO.
Una para cada niña.
Trofeos de corazón acuoso.
Pulpa brillante. Carne
a punto de explosión.
Paladares furtivos.
Avidez del deshielo.
Una sombra de trenes
y de cuerpos pasando.
Detonación de la noche
de aquel siglo partido
y en el aire
la cuenta.
Una. Dos.
::::::::::::Tres y
__________ cuatro.
Cañaverales alcobas.
Cuatro naranjas
espantadas de niebla.

8/1/09



Ninguna fecha fue buena
para decir que no. Una cruz
a machete
hiriendo
para siempre
el calendario.
En la noche de reyes. El verano.
No hay día si lo piensas
donde encaje
una soledad y malnacida
angustia. Una parada
para quitar la piedra.
O tal vez
no caminas
por el propio zapato.

tal vez fui buena

de un rey mago con barba....

4/1/09

Seguimos vivos.
La abuela tarda diez minutos en bajar la escalera.
600 segundos de esfuerzo y jadeo.
Un día sus piernas rotas.
Ojalá corran más que ellas los años, dice otro.
Y yo me rifo ir a comprar noticias.
El periódico no ha atendido las súplicas del año nuevo.
Lujos impagables entre las explosiones.
Página impar: un perfume.
La mujer se desviste.
Luego más dolor.
Tal vez tengan conciencia al fin y al cabo.
Y después de lo amargo te enseñan el caramelo.
Extraño los titulares.
Todos escribimos acerca.
El público se levanta más fácil.
Pero nos avergonzamos si ensucian nuestro recreo.