Está fría la noche e imperfecta
________ lo que vale la pena
lo que alcanza a tocar
con una fina arista
el corazón de alguien
y se hunde
lo que le duele a una
al pasar páginas
el alma de un poeta en días de lluvia.
Comprar trozos de hora en las esquinas
- sí escribí lo importante
y no entendiste nada -
No puedo defender
las cosas que
a esta Luna
no me pesan
a uñas y mordiscos
no puedo
con violencia
ni puedo
(si la boca
y las manos
hay un cuerpo que más me los precisa)
con palabras.
12 comentarios:
Toma ya! Y él/ella se sentó con las orejas porque no sabía qué hacer, ¿no? Quienes no nos quieren, no nos merecen.
Sabes tú dónde se compran trozos de hora?... estarán de rebajas?
no sé no sé
pero que alguien ponga ya un puesto en el rastro
a los que le sobren...
que las subaste
la venta del tiempo
a las oficinas
que hacemos
buenos dííías!
De las pasadas, son pocas las que vendería.
De las futuras, habrá que ver lo que dan de sí.
Pero esta, exactamente esta, la regalo.
Y me he vuelto a quedar atónita.
Y sin palabras.
:) Un abrazo. Im-presionante.
esta 'cosa' que no quiso más que aligerar la noche de quien escribe...
entonces... la regalas...
no se regala un regalo
aunque no guste
¿¿??
hola meike, voy a visitarte en el próximo descanso de trabajo bienvenida
no sabía que por aquí andaras
y si todo fueran pasar páginas, los libros serían eso, testamentos pálidos del nunca estuve en nada, ni en nadie.. leerte te leo mucho aroíta, y pediré con prontitud de amapolas audiencias ventriculares con tus versos para que al amar hagan crianza con los míos, que el poeta muere en la palabra pero es ahí justo también donde empieza..
y yo con ganas de ver a mis mitades, a ustedes,, que ya no se cómo reclamar atención.. tiro de la falda de la madre, pero ya no hay nación, no patria sólo extensión, humo y ciudad .. y luego yo.. y este plasma virtual que exige nailon y llamas y fuego y sábanas
pues eso, que leerte es bailar
ay
...pasar páginas, hum, una mañana de lluvia. Con un café, y un bollo, y otro café o no dependiendo del alzheimer del camarero.
Pasar páginas no es tan terrible; ¿soy yo el único que se muere de ganas por saber qué pone en la página siguiente, y dentro de siete, y de doce y de doscientas cincuenta y siete?
Pues bueno. Todo el futuro para mí, ala.
(Luego regalaré los trozos en partes idénticas, en fin, tendría que entrenar esta maldad de cartón, yo, que así no voy ni para malo de película de Segura...)
Un poema que viene de la noche frecuentemente tiene frio en las entrañas. Un poema en el que habite la palabra violencia, necesariamente tiene que ver con las lágrimas.
Claro que los tiempos del poema no tienen que coincidir con los de los relojes.
A mi me ha llegado el escalofrío.
Un beso
Yo me quedo con la arista y con la luna y con la foto acojonante y os regalo las horas que pase pensando en ellas(0.11) (la bronca por no entender ma produce escalofríos).
"No puedo defender
las cosas que
a esta Luna
no me pesan
a uñas y mordiscos"
(No lo hagas.)
"no puedo
con violencia
ni puedo (...)
con palabras."
(No merece la pena. Hace bien tu cuerpo no pudiendo. Basta saberlo y que no quieras olvidarlo como haces. Escribir y no olvidarlo.)
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