Hemos vuelto a casa. Tres girasoles nos alumbran la entrada. He abandonado las publicaciones del diario vacacional, se interpuso la vida y el viento fuerte de la frontera. Qué más me quedó por decir: que un pueblo francés abandonado, que la vieja aduana con sus extintos puestos de souvenirs, que el Fotógrafo parecía muy feliz en la última cena y estaba muy guapo, que declaramos a Joan, el camarero, capitán de nuestro naufragio.
Madrid parece distinto porque las noches mueven los visillos rojos, nos despiertan para cerrar la ventana de madrugada. Las pequeñas moscas de la fruta han fallecido pegadas al techo. Un helicóptero nocturno sobrevuela la ciudad, atento a la revolución y los brazos en alto. Que hemos colgado los cuadros que esperaron pared durante meses. Que el jabón que compramos en Marsella, o cerca, invade de miel el dormitorio.
Mi perro no se enreda entre mis pasos y le extraño. Ayer, el cumpleaños de mi padre, y hoy es domingo a pesar de que la semana se ha quedado sin su primer mordisco.
7 comentarios:
Bienvenida, aunque yo no estoy... Hay que dominar el mundo, te acuerdas?
traigo de armas las ganas!
muchas además de verte para escuchar desde Israel hasta las tierras altas donde estés
Yo, para que conste, diré que siempre me dejo invitar a paellas (o que, en contrapartida, estamos planeando hacer chilaquiles algún día, ¿cierto?).
Leche, ahora que me fijo ¡esa foto de pared aduanera es bastante mejor que la mía!
Yo no sé por qué no te calco pasos y encuadres...
puees tengo hdr! te lo vendo!
Uy, se hace necesaria una reunión de emergencia para repasar acontecimientos históricos. Contenido y ubicacion a definir :)
Uy, se hace necesaria una reunión de emergencia para repasar acontecimientos históricos. Contenido y ubicacion a definir :)
yo te imaginaba cruzando el Mediterráneo, los dos vestidos de marineros...pero anclarse a un puerto también es de marineros...¿no?
besito...
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